Como el
sonido de la piedra al chocar
Ahora mismo, tengo la muerte presente.
Es guardián celoso, está aquí delante.
Como está quieta, callada y fría,
da la sensación de que está dormida.
Parece que no existe,
parece que no la notas,
aparentemente no la percibes,
pero como niebla densa, todo lo
invade.
Como poderosa tirana te obliga,
Sin querer, la tristeza te domina;
ahora, nada parece igual,
parece que, por momentos, flotas.
a veces, te obliga a mirarla con fijeza.
Entonces se aprovecha de la situación
y llena tu mente de imágenes duras.
De situaciones vividas o soñadas,
de recuerdos lejanos, distantes,
pero que te dejaron bastantes huellas.
Huellas de una vida imaginada o
pasada.
Sin querer, la tristeza te domina;
ahora, nada parece igual,
parece que, por momentos, flotas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario